A menudo te preguntas. ¿Cuánto vale mi casa?
Decidir cuál es el mejor precio para una vivienda es uno de los aspectos más fáciles e importantes del propio proceso de venta.
Por una parte, no quieres establecer un precio tan alto que desanime a los posibles compradores. Por otra parte, no quieres establecer un precio tan bajo que atraiga mucho interés pero que provoque que recibas ofertas por un precio menor que el del mercado real.
No es fácil, pero debes tener algo claro. Para fijar el precio de venta de tu inmueble no debes guiarte por:
- Lo que necesitas
- Lo que te has gastado en ella
- Lo que quieres
- Lo que vale la vivienda que vas a comprar
- Lo que te dijo el vecino
- Tus sentimientos hacia ella
El valor de mercado de tu vivienda nada tiene que ver con eso. O lo que es lo mismo, el valor de mercado de tu casa no está determinado por ti, sino por lo que el mercado está dispuesto a pagar por ella justo en el momento en que tú deseas venderla.
El problema de equivocarse en el precio
- Claramente te equivocaste en el precio (238.000€). El agente insistió en que lo pusieras en 210.000€ pero...
- Te das cuenta y decides bajar un poco (224.000€), pero el mercado te ha vuelto a ganar porque sigue bajando.
- Decides ponerlo al precio que podías haberlo vendido en el mes 1 (210.000€), pero el mercado se ha vuelto a escapar.
- Maldices tu mala suerte y te lamentas de no haber escuchado al API que te aconsejó hace 6 meses.
- La “no prisa” ahora es “urgencia”. Por fin decides vender tu piso y ponerlo algo por debajo del mercado.
- Finalmente se vende por 190.000€. Te ha costado 6 meses y 20.000€.